La excelencia de mi amiga Berta

Mi amiga Berta tiene muchas inquietudes, que ella confunde con talentos. Le gusta escribir, la fotografía, hacer trabajos manuales, que ahora llama DIY, la crítica literaria, la costura y cocinar y, pese a llevar media vida empezando a estudiar inglés, nunca ha pasado de beginner. Cada mes de diciembre prepara una lista para los Reyes Magos, que escribe con creciente ilusión a medida que cumple años, con una ilusión parecida a la que otros sienten al volverse Magos de sus hijos. Berta no tiene hijos. Por eso cree todavía en los Reyes, porque además de padres son ahora también hermanos, novios, algún amante enamoradizo incluso. Un año pidió un ojo de pez y una guía práctica de fotografía digital; al siguiente, cuando quiso acabar con su inveterada ignorancia geográfica, pidió un globo terráqueo, donde ahora posa un dedo al azar cada vez que sueña con viajar. Sigue sorprendiéndose al descubrir la ubicación de todos los destinos. No sólo Rodesia o Kuala Lumpur. También Berlín y Nápoles. Sigue sin creerse lo africanas que son las islas Canarias.

A ella, que nunca come en casa, los Reyes le han traído en sucesivas ocasiones una Thermomix, un carísimo pulsómetro para running, media matrícula para un máster en literatura aplicada y una remalladora, que es una máquina con cuatro hilos que ni siquiera sabe enhebrar. Un verano creyó percibir que las plantas crecían mejor a su lado. Al llegar diciembre habían muerto las suficientes para que descartase pedir un invernadero. En su lugar, ese año solo pidió pijama, bragas y calcetines, además de una sofisticada barra de Chanel, el rojo número 14 concretamente. Un mes antes se había enamorado.

Berta cree que todas esas inquietudes que ella llama talentos, y que abandona sin derramar una lágrima, no han cuajado por falta de tiempo. Tercamente sigue pensado que su don, su talento entre los talentos, es la escritura. Solo lamenta que, al contrario de lo que le ocurría a Picasso, la inspiración nunca la pilla trabajando.

Mi amiga Berta está siempre en construcción. Ella es su gran obra inconclusa.

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